domingo, 30 de octubre de 2016

Leyenda de Rosarito

LOS NOVIOS DE LA CUESTA BLANCA
Leyenda de Rosarito

Una pareja de enamorados contrajo matrimonio en el famoso Hotel Rosarito. Tras la ceremonia, que fue magnífica, partieron en viaje de bodas a Europa. Para ello debían cruzar la frontera y viajar en automóvil hasta Los Ángeles, en donde abordarían un vuelo. El destino les tenía reservada una parada más trafica 
La carretera que une la localidad de Rosarito con Tijuana recibe el nombre de Cuesta Blanca, y es tristemente célebre por la cantidad de accidentes que tienen lugar allí. En esa oportunidad el cielo se presentaba encapotado y una fuerte lluvia arreciaba, dificultando el paso. Como amuleto de buena suerte, la novia llevaba su traje de ceremonia en el automóvil. Al tomar una curva cerrada, el joven perdió el control del vehículo y se estrelló contra un costado del camino. No habiendo tenido la precaución de utilizar el cinturón de seguridad, fue lanzado a través del parabrisas.
Quedó muy malherido, sangrando copiosamente, a la vera de la ruta. La joven había sufrido heridas y contusiones, pero estaba sensiblemente mejor que su flamante esposo. Bajó con dificultad del carro e intentó ayudarlo. 
La joven mujer trató de pedir auxilio, pero en ese día de tormenta los coches que pasaban eran muy pocos, y ninguno se detuvo. El temor a ser asaltados o simplemente la indiferencia hacían que los conductores hicieran caso omiso de los desgarradores gritos de la mujer.Caía la noche y la joven, deseperada, nada podía hacer, más que intentar parar el fluir de la sangre con su vestido de novia. Cubrió  sus heridas con él, y el blanco de la pureza de las novias se tiñó de la sangre moribunda. Con el correr de las horas la vida de su esposo se extinguió: murió desangrado. Al alba de la mañana siguiente un trailero avistó el automóvil accidentado y el cuerpo del hombre, y dio aviso a las autoridades. Cuando la policía llegó al lugar, hallaron al cadáver del hombre, pero no había rastros de su acompañante. Se organizó una intensa búsqueda, creyendo que la joven había intentado obtener ayuda en los alrededores, pero sin ningún resultado. La joven esposa, viva o muerta, jamás fue hallada.
Cuenta la leyenda que en días de tormenta, a los costados del camino de la Cuesta Blanca, los conductores ven a una joven vestida de novia, pero el color de su vestido no es blanco, sino rojo como la sangre. A muchos les hace señas para que se detengan. Quienes lo hacen simplemente la ven desvanecerse, quienes la ignoran o huyen debido al miedo, quizás compartan, días, semanas o meses más tarde, su trágico final...

No hay comentarios:

Publicar un comentario